Dos cabezas coronadas, que encarnan las expresiones bíblicas "Pueblo de sacerdotes, pueblo de reyes" (Éxodo 19: 6 ), marcan dos hitos en la historia de la salvación:

Melquisedec, el rey caritativo de Salem (futura Jerusalén) es el sacerdote del Dios Altísimo, quien trajo a Abraham pan y vino en vez  de la sangre de animales sacrificados (Gn 14: 17-20).
 

Zacarías (1), el hijo de Berequías, fue asesinado en Jerusalén entre el santuario y el altar (Mt 23: 35), y cuya sangre congelada permanecido indeleble. Está representado con la palma del martirio.

Melquisedec y Zacarías llevan juntos  un cáliz.
Sacrificio, coronas, copón y la palma del martirio, todos signos indicando que estos dos personajes encarnan una prefiguración del Mesías cristiano, Rey de los Judios y cordero  pascual sacrificado para la salvación de los hombres.

 
(1) Con el juego de la polisemia, Zacarías también recuerda a otros dos personajes :
- Zacarías, rey de Israel, hijo de Jeroboam, quien fue asesinado por Shellum, un conspirador, poco después de su ascensión al trono ;

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